miércoles, 13 de febrero de 2013

I want to return.

Un día cualquiera como hoy, no pasa nada especial, escuchando música me doy cuenta de la persona en la que me convertí. No soy una mala persona, pero tampoco la mejor del mundo. Me doy cuenta de que ya no soy esa nenita pequeña e inocente que le tenía miedo a la oscuridad, y a que hubiera un monstruo abajo de la cama. Ahora soy una chica que está llena de problemas, confusiones, exámenes, amor, desamor... Me doy cuenta de lo difícil  que es la vida de los mayores y que extraño esos momentos de chiquita en los que me reía cuando me caía, cuando no me importaba lo que pensaran los demás de mi o de mis actitudes, cuando lo único que quería era volver a casa para jugar con mis quinientas barbies, peinarlas y cambiarles la ropa. Extraño cuando todo era una aventura, cuando nadie te juzgaba por las apariencias, solo se acercaban y te trataban como si se conocieran de siempre. Me gustaría volver a ser esa nena, volver a mi infancia. A las películas de Disney, a jugar con todas mis muñecas, a intercambiar figuritas del álbum de Floricienta, a hacer pulseras de hilo enserado y venderlas a $2 pensando que éso era caro. O simplemente, volver a reír como lo hacía antes. Una nena sin ningún problema, jugando y riendo siempre, pero pase lo que pase... No crecer nunca.